viernes, marzo 24, 2017

NUNCA MAS A LA MUERTE

El 24 de Marzo de 1976 fue el fin de un gobierno elegido por el pueblo. Fue el final del gobierno de María Estela Martínez que, tras el fallecimiento de Juan Domingo Perón, se fue transformando en la peor cara de un Estado corrupto, represivo (Desde las entrañas del Gobierno se había creado, a instancias de José López Rega “El Brujo”, la tripe A), e incapaz de resolver los grandes problemas de la sociedad.

El 24 de marzo fue fruto de ese clima violento e intolerante que se venía gestando desde hacía tiempo en nuestro país, pero el golpe Empresario-Cívico-Militar inició algo jamás imaginado.
Desde el Estado se llevó adelante la persecución, secuestro, tortura y asesinato de miles de argentinos. Un estado aún más corrupto destruyó la economía del país, implantando un modelo económico liberal que benefició a los empresarios amigos del poder y desmantelo el desarrollo industrial y productivo.
Muchas generaciones de hoy somos nacidos en democracia, Somos Hijos de la Democracia.

El gobierno de Raúl Alfonsín que asumió el 10 de diciembre de 1983 inició el camino de la verdad, el castigo y la justicia con los mayores responsables de ese siniestro plan sistemático.
La Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas –Conadep- para saber la verdad de lo ocurrido, el Juicio a las Juntas Militares y los líderes de los movimientos armados que encarceló a sus máximos responsables fue el camino para el Nunca Más. No fue un camino fácil, había sectores que no acompañaron, el Partido Justicialista no acompaño ninguno de estos caminos, ellos proponían sostener la ley de autoamnistía que habían negociado con los militares para que todo quedara en el olvido, como venía ocurriendo en otros países de América, y como sucedería por ejemplo en Uruguay, Chile y Brasil.

Somos los hijos de una democracia que hay que mejorar, quedan deudas pendientes de injustica social, falta de oportunidades y millones de hombres y mujeres en la pobreza y la indigencia, pero la intolerancia, la violencia de Estado y la eliminación del que piensa distinto no vuelven más!
Reasumimos el compromiso de seguir trabajando para mejorar nuestro país en democracia, con diálogo y consenso, como nos enseñó Raúl Alfonsín.