MEMORIA Y NUNCA MAS

1ras jornadas por la memoria activa Santa Teresita, 24 de Marzo 2008

El siguiente documento surge del debate final y puesta en común de las ideas discutidas durante las 1ras jornadas por la memoria activa.

Las fechas memorables, cuando se las rememora no tienen el mero objetos de acomodar sucesos en la memoria, ni la finalidad de transmitirlos como una exposición a la mirada liviana del espectador.
Es o pretendemos, que esta fecha sea algo más que la evocación de los hechos, ideas o conceptos en el pasado, sino que muevan las consciencias, son mojones cuyo sentido alegórico es trascender su dinámica hacia el presente histórico y comprenderlos desde lo que hoy sucede como su consecuencia.
En primer lugar para que continúen siendo vigentes como una parte sustancial de las pruebas con que juzgar y hacerles justicia, hasta que ese imperativo categórico quede sin el más mínimo vestigio de impunidad, o se alcen las voces populares que vigilen el cumplimiento de ese objetivo para denunciarlo reclamando Memoria y Justicia para todos los represores y secuaces que provienen de aquel 24 de marzo del 76 y procesos anteriores.
De aquella fecha y sus ulterioridades, tampoco deben quedar en el olvido los fenómenos históricos que de allí en adelante afloraron a la evidencia, como falta de cohesión de los diversos componentes sociales, y la insolidaridad con la que se veía cómo caían estrepitosamente sus instituciones de gobierno hasta convertirlas de Estado Ilegítimo en su origen, en política operativa antipopular, con la finalidad de deshacer o aplastar toda resistencia popular legítima.
Entendemos en el análisis de los hechos históricos durante estas jornadas que el proceso de esperanza y compromiso al ciudadano convirtiéndolo en espectador de su propia vida. Alejando del escenario de la acción y convenciéndolo que sólo puede ser partícipe de la cotidianidad desde la resignación y el silenciamiento de su propia queja.
Se ha logrado la instalación de una nueva cultura del individualismo, del conformismo y la apatía por lo público. Proscribiendo a lo político como toda fuente del mal vivido y por vivir.
Como reflexión final comprendemos que es nuestra tarea la reactivación de la memoria y su proyección a futuros sabiéndonos dueños de nuestras acciones y actores de nuestra vida. Nos debemos el cambio de ROL para volver a ser ciudadanos plenos de derecho, capaces de justicia y seguros de ser dignos en todos los planos de nuestra existencia.


UNIÓN CÍVICA RADICAL
ENCUENTO POPULAR
COALICIÓN CÍVICA